El rebote defensivo es un concepto clave en el baloncesto. No existe una buena defensa que no culmine con la captura del rebote. Este nos proporciona la posesión del balón y evita que el contrario obtenga segundas oportunidades para anotar.
EL REBOTE, EN GENERAL, EN EL BALONCESTO.
Las cualidades físicas como la altura y el salto son ventajas innegables. Los jugadores altos con largos brazos y piernas fuertes van a tener una ventaja inicial sobre el resto. Pero más que las cualidades físicas tendrán importancia la determinación, la agresividad, el esfuerzo, la posición y la técnica.
1. La determinación tiene una parte mental. Significa que estoy con nueve jugadores más en el campo, con opciones de coger el rebote, pero soy yo quien más lo desea.
2. La agresividad es la actitud que nos permite meternos en el área del campo donde mayor contacto físico se produce en nuestro deporte: la zona. Debemos estar preparados para recibir codazos, empujones, algún que otro golpe e incluso hacernos daño.
3. El esfuerzo es la parte física. Tiene que ver con ir al rebote el 100% de las veces que se produce un tiro. También tiene que ver con pelear por coger el balón en el primer intento, y si no lo conseguimos, con la disposición de luchar en un segundo y tercer esfuerzo si fuera necesario hasta lograrlo.
4. La posición y la técnica para todos los rebotes es importante. Ganar la posición interior bloqueando al oponente, dejándolo detrás de nosotros, nos da mucha ventaja. Pero hay dos detalles fundamentales:
1) No debemos meternos debajo del aro.
2) Ser capaces de mantener la posición dos o tres segundos una vez ganada ésta.
El salto vertical es una excelente cualidad para un reboteador. Por supuesto que debemos potenciar estas cualidades pero además de ayudarles a saltar más alto debemos enseñarles a saltar de la manera adecuada y con rapidez. Un salto correcto llevará consigo la flexión de las rodillas y un salto sobre ambos pies usando el empuje de los brazos para alcanzar su completa extensión.
EL REBOTE DEFENSIVO, EN PARTICULAR, EN EL BALONCESTO.
Como hemos dicho muchas veces, cuando estamos defendiendo debemos mantener una posición entre nuestro atacante y la canasta. Esta posición interior, más cercana a la misma, nos va a proporcionar una ventaja importante a la hora de conseguir el rebote defensivo tras un tiro fallado.
En algunos casos puede ocurrir que la posición exterior sea más ventajosa, como ocurre cuando se produce un tiro de larga distancia el cual rebota lejos y pasa por encima de nosotros, que tenemos la posición interior ganada. Pero esto ocurre en muy pocas ocasiones, por lo que vamos a centrarnos en coger la posición interior que es la más ventajosa en la mayoría de los casos.
Debemos enseñar a nuestros jóvenes jugadores algunos detalles del rebote:
1. Un tiro realizado desde la esquina, rebotará hacia el lado opuesto desde donde se lanzó en el 95% de los casos (ver gráfico abajo a la izquierda).
2. Un tiro lanzado desde un lado, el 70% o 75% de las veces suele salir despedido hacia el lado opuesto (ver gráfico abajo al centro).
3. Un tiro lanzado desde el frontal suele caer el 90% de las veces en el centro de la zona, o en el área del tiro libre si es un tiro de larga distancia (ver gráfico abajo a la derecha).
4. Un tiro lanzado en un radio corto genera un rebote corto, y viceversa.
5. Algunos aros, por su dureza, generan rebotes más largos que aquellos que son más blandos. Esto debería observarse durante el entrenamiento del día anterior o durante el calentamiento, si jugamos con unos aros que desconocemos.
6. La dureza del balón también tiene la misma influencia. Balón duro=rebote largo; balón blando o poco hinchado=rebote corto.
Una vez que conocen estos detalles les enseñamos cómo cerrar el rebote y recuperar el balón. Pero antes de ello tenemos que transmitirles una idea fundamental: pensar que el tiro no entrará.
Esquemáticamente vamos a descomponer el rebote defensivo en tres pasos. Por supuesto, aunque lo dividamos en partes, la realidad es que el gesto del rebote defensivo es tan rápido que es una única acción.
1. Ver el tiro, ir hacia el atacante y bloquearle.
Debemos ser conscientes en todo momento de dónde está el balón y por ende de cuándo y desde dónde se realiza el tiro. Una correcta posición defensiva nos ayudará a conseguirlo. Podemos usar palabras como “tiro” para advertir al equipo que un atacante ha tirado, pero no hay nada más efectivo que seamos nosotros mismos quienes observemos el balón y su lanzamiento. La mayoría de los jóvenes tienen el mal hábito de mirar el balón cuando va por el aire, eso les resta posibilidades de coger una buena posición de rebote y les convierte en meros espectadores.
Cuando el balón sale de la mano del tirador y está en el aire, entramos en una lucha con el atacante por conseguir la posición interior. Los defensores, que tenemos la parte interior y la ventaja inicial, debemos localizar a nuestro atacante o al más cercano, ir hacia él y bloquear su camino hacia la canasta con nuestro cuerpo y los antebrazos en ángulo recto.
Cuando el atacante decida superarnos rodeándonos por un lado, pivotaremos sobre un pie dejándolo a nuestra espalda. Debemos mantenernos en todo momento en una correcta posición básica defensiva, con las rodillas flexionadas y los pies abiertos para conseguir una sólida base. Esto impedirá que nos ganen la posición interior. Mantendremos los brazos abiertos a la altura de los hombros formando con el codo un ángulo de 90º para evitar que bloqueen nuestros brazos. Debemos tener contacto permanente porque es la única manera que tenemos de “sentir” que el atacante está ahí (le estamos dando la espalda y no podemos verlo). La espalda, el culo y los codos suelen ser utilizados con este propósito.
A esta técnica de bloquear el camino del atacante a nuestro aro y la acción de ganar la posición interior dejando al atacante detrás de nosotros es lo que llamamos «cerrar o bloquear el rebote». Es la piedra angular del rebote defensivo.
¿Qué detalles debemos tener en cuenta en el bloqueo del rebote defensivo:
1) Realizarlo lo más lejos posible del aro. No debemos dejarnos empujar debajo del mismo.
2) Mantener el contacto con el atacante a nuestra espalda manteniendo una sólida posición básica defensiva, debiendo estar preparados para desplazarnos lateralmente con pasos cortos y con la espalda recta para evitar que el atacante pueda superarnos y coger el rebote.
3) Mantener el bloqueo hasta que sepamos dónde y cuándo caerá el balón.
Existen dos técnicas de bloqueo del rebote defensivo:
1) Pivote en reverso. Es la opción que particularmente más me gusta y la que más he enseñado. Como dijimos antes partimos de la posición básica y de frente al atacante al que hemos frenado en su camino al aro con nuestro cuerpo y antebrazos. Cuando el atacante decide superarnos rodeándonos por un lado, pivotamos sobre el pie más cercano a ese lado dejándolo a nuestra espalda y manteniendo la posición interior.
2) Pivote frontal. Partiendo de la posición anterior, cuando el atacante decide superarnos rodeándonos por un lado, cruzamos el pie más alejado a ese lado dejándolo a nuestra espalda y manteniendo la posición interior.
Hay una situación especial que se produce cuando bloqueamos el rebote muy lejos de nuestra canasta. En muchas ocasiones, cuando defendemos a atacantes fuera de la línea de tres puntos, nos vamos a encontrar con que no tienen la intención de ir a coger el rebote ofensivo. En estos casos no vamos a tener que ponernos frente a ellos y bloquear su camino a nuestro aro, pero tendremos que estar seguros de que un rebote largo no caiga en sus manos. Por esa razón, estando en nuestra posición básica defensiva, nos acercaremos de lado al atacante con nuestro pecho siempre orientado hacia el centro de la cancha y contactaremos con éste mediante el antebrazo más cercano (en ángulo recto) mientras miramos el balón.
Sería un error que al ver que el atacante no entra al rebote ofensivo le abandonemos y nos dirijamos hacia la canasta.
No podéis imaginaros cuántas veces se ve al defensor yendo hacia el centro de la zona para coger el rebote y el balón pasándole por encima de su cabeza, siendo capturado por su atacante que sólo hizo una cosa: permanecer en el perímetro.
Y hay otra situación especial que debemos conocer. Es aquella en la que se produce un lanzamiento a canasta cuando estamos defendiendo por delante a un atacante en el poste bajo y por consiguiente no tenemos la posición interior.
¿Qué podemos hacer para recuperarla?
El atacante tiene la posición interior en el momento del tiro y es casi imposible que la recuperemos, pero sí podemos pelear por ganar la posición desde la parte más próxima a la línea de tiros libres y empujar al atacante hacia la línea de fondo. De esta manera reducimos su espacio para el rebote.
2. Ir a por el balón, cogerlo y protegerlo.
Una vez hemos bloqueado al atacante y le hemos dejado detrás de nosotros, mantenemos los ojos en el balón, vamos agresivamente a por él con las rodillas flexionadas, saltamos fuerte sobre ambos pies y usamos el empuje de los brazos para alcanzar su completa extensión. Luego cogemos el balón con las dos manos para asirlo con fuerza. Así evitamos que se nos escape o que el atacante nos lo quite.
En algunas ocasiones puede ocurrir que el balón no caiga exactamente donde esperábamos y sea imposible cogerlo con las dos manos. En estos casos debemos intentar controlarlo con una sólo llevando luego la otra al balón en un segundo esfuerzo, o palmearlo hacia un compañero si no tenemos opción de controlarlo.
El salto y el timing (o momento del salto) son dos cualidades muy útiles a la hora de ir a por el balón. No es importante lo que saltemos sino cuándo lo hacemos.
Al caer del salto debemos hacerlo con una visión total del campo, con una base firme, piernas separadas y rodillas flexionadas. El peso del cuerpo estará distribuido por igual entre ambos pies.
Proteger el balón tras ser capturado es, en muchos casos, más difícil de lo que parece. Los atacantes pueden golpearlo y quitárnoslo de las manos.
¿Cómo podemos protegerlo?
La manera de proteger el balón la podemos ver en movimientos básicos (pies y manos).
La situación más común con la que nos podemos encontrar cuando hemos conseguido coger el rebote es aquella en la que un atacante (generalmente quien fue bloqueado por el reboteador) está cerca y nos intenta robar el balón. Entonces pivotamos lejos de él y luego pasamos el balón a un compañero libre o salimos botando.
Cuidado con botar nada más coger el balón cuando hay muchos jugadores a nuestro alrededor. Esta es una gran oportunidad para que un oponente robe o despeje el balón.
Si en lugar de tener a un único oponente estamos rodeados por dos, lo único que podemos hacer es mantener el balón protegido bajo la barbilla, mirar por encima del hombro y leer las opciones.
1) Una opción puede ser “colarse por el medio” de ambos. Si vemos que los defensores del trap no cierran bien y dejan un pequeño espacio por el que escaparse, nos metemos entre ellos. A veces una finta de pase por encima de la cabeza puede hacer que los defensores muevan sus pies y nos dejen ese espacio para escapar.
2) Otra opción es fintar un pase bajo y luego lanzar un pase por encima de ellos. Es evidente que si dos oponentes están sobre el balón hay un compañero libre sin defensa.
3. Pasar el balón o botarlo.
Una vez hemos conseguido el balón y lo hemos protegido correctamente mantendremos la vista alta para visualizar todo el campo.
Dependiendo de la situación de juego y de nuestra habilidad podremos pasarlo o salir botando.
1) Pasar el balón. Es la mejor opción si queremos jugar al contraataque.
Si decidimos pasar el balón a un compañero para correr, debemos pivotar hacia el lado más cercano a éste, para luego darlo con rapidez y precisión. Debemos hacerlo hacia un lateral mejor que al centro, que es donde más tráfico hay.
La longitud, velocidad y precisión del pase serán factores que influirán en el desarrollo del contraataque. Los mejores pases son el de «béisbol» y el de a «dos manos sobre la cabeza». Esto es debido a que son pases que se dan desde arriba.
2) Salir botando. Aplicaremos una regla básica: «No botar nunca tras un rebote si podemos pasar a un compañero libre».
Siempre que tengamos una opción de pasar a un compañero libre, lo haremos. Si no la tenemos, podremos salir botando según nuestra habilidad para hacerlo.
Si preparamos a todos nuestros jugadores a salir botando tras coger el rebote, ésta maniobra puede ser muy efectiva:
A. Porque evita la posibilidad de perder el pase.
B. Porque no necesita que nadie vaya a buscar el pase y todos corran hacia la canasta contraria.
C. Porque tenemos al reboteador botando por el centro de la cancha mientras los demás corren abiertos.
D. Porque creamos situaciones de superioridad numérica al sorprender a los reboteadores de ataque rompiendo con el bote. Estos reaccionarán tarde produciéndose ventajas numéricas.
Benjamín Cruz dice
Más que un comentario es unja pregunta, tiene algo sobre el bloqueo de pase de forma activa y pasiva?
Ángel dice
Buenos días Benjamín.
Perdóname pero no sé exactamente lo que me preguntas. ¿Te refieres al bloqueo directo con mano a mano?
Si es así, no tengo nada al respecto aunque lo tengo en cuenta para introducirlo en la web.
Muchas gracias y un saludo.
Benjamín Cruz dice
Perdón es de rebote
Ángel dice
Hola de nuevo Benjamín.
Perdona pero no vi que tenías dos mensajes.
Todo lo que tengo de rebote esta en la web, analizado como rebote defensivo y ofensivo dentro
del epígrafe TÉCNICA.
De nuevo, muchas gracias y que tengas un buen día.
ESTEBAN ENRIQUE ALVEAR LOAISA dice
BUENA INFORMACION BENJAMI ME SIRE PARA LSO TRABAJOS
Ángel dice
Muchas gracias Esteban y disculpa que haya tardado tanto en responderte.
Me agrada que esta web te sea útil.
Un saludo y mucha salud.
JESUS RODRIGUEZ MATA dice
Disculpe en la posición de rebote defensivo se pueda tener los brazos extentendidos formando un ángulo de 180 grados mientras empujo hacia atrás con el cuerpo?
Ángel dice
Buenas noches Jesús.
Por supuesto que se puede. Piensa una cosa: teniendo los brazos abajo es muy fácil que el atacante, en su lucha cuerpo a cuerpo por coger el rebote, los bloquee y nos dificulte que los levantemos para capturar el balón. Es más difícil que lo logre si los tenemos ya arriba preparados para sólo extenderlos.
Espero que esto te ayude.
Un saludo.